22 de julio de 2020


                              TEM(n)ER


De repente el suelo se ha convertido en gravilla fina.

Y te ves algo desdibujado cuando te miras.

Nada es de uno, eso ya lo sabias.

Pero confunde no reconocerte, por momentos, en esta vorágine que no termina.

Parece que no llegas ahí donde te necesitan.

El miedo y las esquinas siempre han sido muy amigas.

Puede que no haya razón para este andar desarreglado.

O que haya mil escondidas bajo los hábitos.

Si.

También puede que seas aún un trazado, creyéndote paisaje.

O simplemente un ensayo de miedos en este ambiente nuevo.

No hay que temer.

Tranquila.

Solo aprende y respira.

  El gimnasio Llevo un jersey que no es mío , está limpio y me vale, los pantalones rojos de hace días y las zapatillas de deporte , las últ...